JORNADAS PARLAMENTARIAS SOBRE "PROPUESTAS PARA UN NUEVO MARCO JURÍDICO DEL DEPORTE"
JORNADA 5: “EL DEPORTISTA Y SU ENTORNO”
La penúltima de las jornadas parlamentarias sobre “Propuestas para un nuevo marco jurídico del Deporte” llegaba tras varios meses de stand by en los que el cambio de Gobierno no ha supuesto un parón en la tramitación de la futura Ley, sino que, con continuidad, se han seguido dando pasos para hacer una norma que realmente se adapte a las necesidades actuales del deporte español.
En esta ocasión, el lunes 29 de octubre se daba paso a la jornada “El deportista y su entorno”. Una temática con muchos matices, dado el nivel de desprotección al que están expuestos los deportistas, frente a un marco jurídico que ha aspirado a poner la marca España como líder del deporte de competición a nivel mundial, pero que no ha ofrecido las coberturas legales adecuadas para la profesionalización, o la inclusión de aquellos más vulnerables.
La primera mesa estuvo compuesta por cuatro deportistas de reconocido prestigio y que conocen de primera mano algunas de las necesidades de protección jurídica que han de implementarse en la futura ley.
Leire Olaberría, varias veces medallista olímpica en ciclismo en pista, contó su experiencia en relación a la maternidad y la conciliación con la alta competición, que incluso le ha llevado a iniciar procedimientos legales contra su Federación.
La atleta de media distancia (1.500 m. l.), Marta Pérez, habló desde la perspectiva del deportista en activo, y que desde hace apenas un par de años puede considerarse la élite del atletismo.
Eva del Moral ya era triatleta antes de que un accidente con la bici la llevase a la silla de ruedas. Ahora es un referente en el paratriatlón. No solo insistió en la necesidad de acercar el deporte a las personas con diversidad funcional, especialmente haciendo el material más accesible económicamente, sino que también recalcó que la conciencia social con respecto a los deportistas con alguna discapacidad debe cambiar, porque, al fin y al cabo, también son deportistas de alto rendimiento.
El famoso waterpolista Víctor Gutiérrez habló de temas de interés como el reconocimiento de competencias profesionales, ya que la carrera profesional de un deportista no es reconocida como experiencia laboral cuando se incorpora a otro mercado de trabajo. También habló del gran problema de la homofobia, que aunque él nunca ha sufrido discriminación a este respecto, sí es cierto que existe un problema cuando hay tan pocos deportistas que han reconocido su homosexualidad. Este problema cree que se acrecienta aún más en el deporte base, donde la homofobia se acompaña de bullying, y al final se produce un abandono de la práctica deportiva.
A este respecto, en el turno de preguntas, el Consejo COLEF puntualizó que hablar de romper armarios y homosexualidad en el deporte se queda corto. No basta con regular para combatir la homofobia, la bifobia o la transfobia. La transexualidad y la intersexualidad deben ser abordadas desde la futura ley, fomentando medidas para que estas personas puedan competir, pero también para que puedan practicar deporte en instalaciones preparadas para las personas que se encuentran en proceso de transición.
Otro de los temas que se trataron fue la relación laboral de los deportistas con los clubes, que, actualmente, por falta de legislación, en muchos casos se cierne solo sobre la jornada competitiva, ignorando que también el entrenamiento debería ser parte de la relación contractual. Así pues, el IRPF cotizado al finalizar la carrera deportiva es tan irrisorio que incluso supone un problema personal.
Esta mesa con deportistas estaba coordinada por la periodista Paloma del Río, que en sus aportaciones subrayó la importancia de legislar contra los abusos, y no solo sexuales, sino también de poder, del cuerpo técnico hacia los deportistas.
Fuera de las tres mesas programadas, intervino Alberto Aláiz, un jugador de rugby que quedó tetrapléjico tras un rodillazo en la cabeza en un partido. El seguro pretende indemnizarle con sólo 12.000 euros, que es la cuantía que figura como mínima en el Real Decreto del seguro mínimo obligatorio de 1993, que supuestamente debía haberse revisado y actualizado cada 3 años. Ahora este deportista lucha por que se actualice el baremo de seguro deportivo.
El segundo panel, más diverso, estaba compuesto por Carmen Arnaudas, médico del deporte de la AEPSAD, Enrique Cifuentes, presidente CD Fortuna, Víctor Padial, padre de la biatleta Victoria Padial, y Miguel Ángel Mostaza, manager de deportistas. Dos temas vertebraron esta mesa: por un lado la protección de la salud del deportista, y por otro las ayudas que éstos reciben para impulsar su carrera deportiva.
Para finalizar, el último panel reunió a otros agentes que rodean la vida del deportista de competición: los profesionales del deporte, los árbitros y los organizadores de eventos. Todos ellos son pilares fundamentales en el deporte de competición, y su regulación también debe quedar definida.
Esperanza Mendoza, árbitro profesional de baloncesto, compartió con todos los asistentes la felicidad que siente al ver el apoyo de su Federación al arbitraje femenino, que ha crecido exponencialmente en los últimos cuatro años. Por otra parte, denunciaba la falta de legislación existe con respecto a la relación laboral de los árbitros con la entidad que les contrata. La fórmula de autónomos no es suficiente para proteger a estos trabajadores, que también son deportistas, y que solo son remunerados por evento en el que participan. Las lesiones, las enfermedades, la maternidad e incluso el derecho a paro son cuestiones que quedan desamparadas ante la actual situación en la que se encuentran.
Víctor Martínez, administrador único “Laetus Sport S.L.”, aportó su visión como organizador de eventos, poniendo de relieve la necesidad de legalizar el dinero de bolsillo o pocket money para afrontar los incentivos para los voluntarios. En los eventos deportivos el voluntariado es una pieza fundamental, pero eso no quiere decir que no deban estar formados o no recibir nada. Las empresas que se toman en serio la fidelización de voluntarios a través de pequeñas aportaciones económicas actualmente tienen un problema para justificar estos gastos.
Claudia Pons, entrenadora de la Selección Nacional de Fútbol Sala femenino, y Santiago Santos, director deportivo de la Federación Española de Rugby, ampliaban su denuncia ante la inestabilidad laboral de los profesionales del deporte que se dedican tanto al deporte de rendimiento como al de base, dado que las condiciones que ofrecen obligan a compatibilizarlo con otros trabajos que permitan subsistir. También destacaron la importancia de contar con profesionales debidamente formados.
Una de las reflexiones, que realizaron en uno de los turnos de preguntas los miembros del Consejo COLEF allí presentes, fue que es muy positivo reformular el marco jurídico del deportista en el ámbito competitivo, definir qué es profesional y qué no es profesional, soportar la vida competitiva con una serie de derechos que fomenten la equidad. Sin embargo, es necesario que la ley del deporte establezca una serie de categorías de “deportista”, desde el usuario de práctica recreativa hasta el profesional, porque si no solo desarrollarán los derechos y deberes de un porcentaje poblacional muy pequeño. Hay que definir quiénes son los deportistas, y replantearse una pirámide desde la que abordar a todos los practicantes del deporte.
El próximo 5 de noviembre, lunes, se celebrará la última jornada parlamentaria en el Senado, donde María José Rienda presentará las líneas básicas que deberá seguir la nueva Ley del Deporte.
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